Soy un niño terrible, que juega con los colores como una ñusta tejedora que tiñe los mantos sagrados Soy un niño con manos pequeñas que juega con el barro como un amauta con las estrellas que observa
el destino de la vida. Soy un niño que construye y destruye y crea. Dibujo la luz, el aire y las montañas para la vida, la alegría y la felicidad de los hombres buenos. Soy un niño de los Andes, que
juega con el arcoiris. El color; su existencia es la alegría; sentirlo, olerlo, es un placer, es una pasión. Soy tan terrible, que juego con las formas, sin reglas, sin trampas, pero tan terrible,
tan terrible, que tal vez a alguna gente no le guste, pero aqui estoy.
MAMANI MAMANI